La próstata es un órgano que crece más rápido en unos varones que en otros, por razones que no están claramente establecidas. Esto es parte del desarrollo normal del cuerpo humano. No obstante, llega el momento en el que el crecimiento de la próstata empieza a causar problemas y es el punto en el que se habla de “hiperplasia” (crecimiento mayor de lo deseable).
El engrosamiento de la próstata alrededor de la uretra actúa como un cinturón que estrecha progresivamente el conducto de la orina. Esto se traduce en dificultad para orinar y disminución del calibre y la presión del chorro.
Es necesario acudir al médico tan pronto como se perciban cambios como dificultad o molestias para orinar o disminución en el calibre o presión del chorro de orina. Esto permitirá una actuación oportuna, evitando complicaciones, pero hoy sugerimos algunos jugos para cuidar la próstata.
JUGO DE TOMATE Y NARANJA
INGREDIENTES
4 tomates
2 naranjas
Preparación
Exprime las naranjas hasta obtener su jugo. Pasa los tomates por el extractor de jugos, mézclalo con el de la naranja y bebe de inmediato.
JUGO DE YOGURT
INGREDIENTES
1 plátano
½ taza de blueberries
150 gramos de yogurt natural
1 taza de jugo de manzana
Preparación
Coloca todos los ingredientes en la licuadora y mezcla hasta que se homogenicen. Bebe de inmediato.
TÓNICO
INGREDIENTES
6 tomates
2 ramas de apio
2.5 cm de jengibre
Preparación
Lava los ingredientes.
Pasa los tomates por el extractor de jugos, luego el apio y por último el jengibre.
La combinación de tomate y apio es deliciosa.
SOJA, EXCELENTE PREVENTIVO
Un estudio realizado en la Universidad de Tampa (Florida, U.S.A) ha mostrado que el suplemento de la dieta con isoflavinas de soja, en pacientes con cáncer de próstata inicial produce cambios en los niveles de testosterona y PSA (Antígeno Prostático Específico) .
Durante 12 semanas se trataron con isoflavonas de soja o placebo, a 66 varones con cáncer de próstata entre 50 y 80 años.
La testosterona se redujo o no sufrió cambios en un 61% de los casos tratados con isoflavonas, comparado con 33% de los casos tratados con placebo.
El PSA, disminuyó o se mantuvo sin cambios en 69% de los tratados con isoflavonas frente a 55% de los que recibieron placebo.
En 19% de los que recibieron isoflavonas el PSA se redujo en dos o más puntos durante la duración del estudio. Los resultados del estudio sugieren que el suplemento con isoflavonas en pacientes con cáncer de próstata inicial, aún en estudios de corta duración (12 semanas) altera de forma significativa marcadores de proliferación como el PSA y la testosterona libre.
Se debe valorar la posibilidad de que el consumo prolongado de soja pueda retardar la aparición de cáncer de próstata.
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