Campos de Solana celebra una vendimia exitosa

La bodega logró realizar la cosecha del año con mucho esfuerzo y optimismo, pese a las barreras socio-económicas que desató la crisis sanitaria desde la gestión anterior. 

El esfuerzo de más de 500 personas comprometidas rinde frutos. Campos de Solana celebra la cosecha del año con números positivos pese a los desafíos que impuso la crisis sanitaria y factores climatológicos. Este logro es el resultado de una cadena productiva sólida, donde intervienen productores, cosechadores, transportistas y trabajadores de mano de obra calificada y experimentada.

“Sumamos una vendimia más en la historia de nuestra bodega y la dedicación por producir vinos de calidad siempre ha sido nuestro objetivo. Este año, cumplimos con la cantidad de litros que demanda el mercado y generamos más de 300 empleos indirectos. Hemos mantenido los volúmenes de compra de uva de años anteriores a los productores, para no perjudicarles y fortalecer la reactivación económica desde este sector”, enfatiza Mauricio Kolle, Brand Manager de la marca, a tiempo de mencionar que junto con la marca Casa Real, son los mayores compradores de uva de la región.

Campos de Solana cuenta con 160 hectáreas, de las cuales, más de 80 se destinan a la producción de uva para vinos de alta calidad de Reserva y Gran Reserva. “Este año, la madurez fue uniforme, con buena concentración fenólica y con buen potencial de guarda. Estas características de nuestros productos nos destacan a nivel internacional, con etiquetas que encantan paladares por su sabor y aroma”, dice Kolle.

Acerca de Campos de Solana

Campos de Solana es líder nacional y un gran referente a nivel internacional, porque cuenta con la mayor cantidad de medallas en Bolivia. La bodega nació en el año 2000, con la visión de producir los vinos más refinados del valle de Tarija, combinando vanguardia con tradición vitivinícola familiar, tanto a nivel de sus recursos humanos como en tecnología. Los viñedos están situados a más de 1.850 m.s.n.m. en el cálido clima del valle, donde el aire puro y la luz intensa producen condiciones idóneas para cultivar la uva y crear vinos de calidad como el Trivarietal Reserva, que fue incluido entre los “Mejores Vinos del Año” en 2014.