La velocidad a la que se consume alcohol puede verse influenciada por la forma del vaso en que se sirve, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Bristol (Reino Unido). Según han podido comprobar Ángela Attwood y sus colegas de la Escuela de Psicología Experimental, los vasos curvados invitan a beber cerveza el doble de rápido que los vasos rectos. Cuando los mismos vasos se rellenaban con bebidas no alcohólicas, por ejemplo refrescos, la velocidad de consumo era independiente de la forma del recipiente. El estudio fue publicado en la revista PLoS One.
No hay comentarios:
Publicar un comentario